Piranesi

(text-style:"bold")+(text-color:"blue")[El puente de la Vía Salaria] [[Jugar]] <img src=https://i.imgur.com/JdsI968.jpg>

La vista de la torre del puente de la (text-color:"red")[vía Salaria] era impresionante. La suave brisa que provenía de Roma acariciaba mi recién afeitada faz. Me habían dado una plaza para trabajar con (text-color:"yellow")[Luz Donati], célebre arqueóloga y profesora de mi Universidad. Aunque a mí no había llegado a darme clase, todo el mundo la conocía. Rara era la persona que nunca había escuchado su nombre en algún momento de la carrera. Todos trabajábamos en una nueva excavación pues se habían descubiertos indicios de otra torre cerca del puente. Pincelada a pincelada iba retirando arena de las ruinas. Soñaba con hacer algún grandioso descubrimiento y ser tan reconocido como (text-color:"yellow")[Luz Donati]. [[Pincelada a pincelada]]

Era un verdadero placer trabajar con (text-color:"yellow")[Luz Donati]. Me sentía orgulloso de haber conseguido la plaza. Todos mis esfuerzos habían merecido la pena. Todas aquellas noches en vela. Todos aquellos meses preparándome, para ahora verme siendo parte del equipo de excavación del Puente de la Vía Salaria. Volví a mirar la impresionante torre del puente. Empecé a recrear, en mi imaginación, aquella época pasada de esplendor romano. Ojalá poder tele transpórtame por un instante a (text-style:"blur")[1756…] ¡pero qué digo! Al siglo I d. C. [[Pincelada a pincelada.]]

(text-color:"yellow")[Luz Donati] estaba radiante aquella mañana. Su pelo castaño bailaba al son del viento y algunos mechones formaban pequeñas y graciosas volutas que le daban un aspecto más juvenil. Y luego estaba yo, un ser vivo más, un organismo cuya mera existencia se debía a la generosidad de (text-color:"yellow")[Luz Donati], quien había aceptado que aquel día estaría trabajando junto a su equipo y no lamentándome en la oscuridad de mi habitación. Y así pasaron las horas. [[Terminando la jornada]]

Francesco me estaba esperando en el recibidor de mi piso. Se restregó por mis piernas mientras maullaba incansable pidiéndome la cena. -¡Un minuto que dejo las cosas y enseguida te preparo la cena! -Le exclamé al felino. Después de soltar todos los instrumentos de arqueología en el salón. Me dirigí a la cocina y observé las dos bolsas nuevas que le había comprado ayer. ¿Qué sería esta vez? [[Pienso de pavo]] [[Pienso de pollo]]

El pienso anterior que le había dado para la comida había sido de pollo así que, ¿por qué no darle algo diferente de cena? Eché el pienso en su cuenco verde y le acaricié la cabecita. -¡A cenar! Que te lo mereces. Hoy has tenido un día gatuno muy largo…al igual que yo… Miré el paquete de la comida. ¿Por qué me apetecía comerme un puñado de pienso? [[Comerme un puñado de pienso]] [[¡Qué asco!]]

El pienso anterior que le había dado para la comida había sido de pavo así que, ¿por qué no darle algo diferente de cena? Eché el pienso en su cuenco verde y le acaricié la cabecita. -¡A cenar! Que te lo mereces. Hoy has tenido un día gatuno muy largo…al igual que yo… Miré el paquete de la comida. ¿Por qué me apetecía comerme un puñado de pienso? [[Comerme un puñado de pienso]] [[¡Qué asco!]]

Francesco me dirigió una mirada furtiva cuando decidí compartir su comida. -¡Eh! Que solo la estoy probando. Relájate. No está mala pero tampoco la voy a incorporar a mi dieta. De repente, mi móvil vibró en el bolsillo de mi pantalón. Era Julia. Mi compañera de trabajo y de carrera. Ella había llegado antes que yo a la excavación. Tampoco sabía muy bien si su presencia había ayudado a que consiguiera mi puesto. <img src=https://i.imgur.com/jWPtPpe.jpg> (font:"consolas")[Sé que suena un poco loco. Pero hoy celebran el aniversario en el bar cerca de mi casa. Tienen los mejores chupitos que he probado en mi vida y hoy, exclusivamente, podremos probar tres nuevos. ¿Qué te parece? Sé que mañana trabajamos pero sólo nos beberemos tres y cada uno para su casa. ¡Venga que es jueves!] [[No creo que sea buena idea. Además, al final tres se convierten en cuatro o cinco]] [[¿Y por qué no? Ya tendremos tiempo de arrepentirnos]]

¿Cómo se me pudo ocurrir esa estupidez? ¿En qué demonios estoy pensando? Dejé el paquete de comida en la encimera y de repente, mi móvil vibró en el bolsillo de mi pantalón. Era Julia. Mi compañera de trabajo y de carrera. Ella había llegado antes que yo a la excavación. Tampoco sabía muy bien si su presencia había ayudado a que consiguiera mi puesto. <img src=https://i.imgur.com/jWPtPpe.jpg> (font:"consolas")[Sé que suena un poco loco. Pero hoy celebran el aniversario en el bar cerca de mi casa. Tienen los mejores chupitos que he probado en mi vida y hoy, exclusivamente, podremos probar tres nuevos. ¿Qué te parece? Sé que mañana trabajamos pero sólo nos beberemos tres y cada uno para su casa. ¡Venga que es jueves!] [[No creo que sea buena idea. Además, al final tres se convierten en cuatro o cinco]] [[¿Y por qué no? Ya tendremos tiempo de arrepentirnos]]

(font:"consolas")[Tienes razón. La última nunca es la última, ¿verdad Sergio? Bueno. Pues nos vemos mañana.] No sabía qué responderle. ¿Había hecho bien? Julia me atraía de alguna manera. No sabía mucho más de ella excepto que habíamos sido compañeros de carrera, pero nunca habíamos entablado una amistad más allá de lo profesional. ¡Por eso tenía que haber aceptado! ¿Por qué me negué? Quizás pueda enviarle un mensaje escribiéndole que al final sí me animo. (text-color:"purple")+(text-style:"bold")[Abrir whatsapp] [[Home]]

(font:"consolas")[¡No esperaba menos! Perfecto. Pues nos vemos allí dentro de 40 minutos. No tardes mucho] Abrí el frigorífico y saqué lo primero que vi para hacerme un sándwich y comer algo apropiado antes de irme. [[Comerse el sándwich]]

Francesco me miró con ojitos porque lo dejaba sólo de nuevo. - Ya volveré. No te preocupes. Vigila la casa. Cerré la puerta del piso y caminé quince minutos hasta llegar al bar que Julia me decía. No vivíamos muy lejos el uno del otro. Esperándome en la puerta y con la cabeza agachada me esperaba Julia. Tenía el pelo castaño oscuro el cual le caía en cascada por la espalda. Vestía un abrigo de peluche de color marrón. Una falda corta roja y unas medias negras opacas. Apoyaba su bota derecha en la pared del bar. - Extrañamente has sido puntual. - ¡Ey! Que en el trabajo siempre llego a la hora. Julia no dijo nada y abrió la puerta del bar. En la universidad no se me conocía como una persona muy puntual pero desde que empecé a cumplir más años, me di cuenta de la importancia de llegar a la hora exacta. [[Seguir a Julia]]

El bar estaba plagado de gente. Aún era muy temprano pero ya rezumaba cierto aroma a alcohol. Enseguida me entró calor forzándome a quitarme el abrigo. Julia hizo lo mismo revelando una camiseta negra de manga corta muy ajustada. - Voy a pedir los chupitos. Vente. Vamos a la barra.- Me gritó Julia intentando abrirse paso ante la muchedumbre. - Hay demasiada gente.- Dije en vano pues no sé cómo consiguió colarse entre el resto y ya estaba pidiendo la bebida. Al rato, volvió con dos cervezas volviéndose a abrirse paso a codazos. - ¿Y los chupitos? -Pregunté. - Se les han acabado. Hemos llegado tarde. - Respondió entregándome la cerveza. Me extrañé ante ello pues era lo que se ofrecía en exclusiva aquella noche. Lo lógico es que hubieran comprado muchas botellas. Además, la noche acababa de empezar. Bueno, supongo que no tiene importancia... Le pegué un sorbo a aquella cerveza que no había pedido y decidí entablar conversación. [[¿Qué hiciste después de terminar la universidad?]] [[¿Aún te sigues juntando con los compañeros de la uni?]]

-Hice un master de arqueología y luego tuve la grandísima suerte de que me cogieron para este proyecto. Ya sabes cómo están las cosas. -Sí. No es nada fácil encontrar un trabajo decente estos días. Yo también he tenido suerte… -Bueno. Suerte, suerte…-Comentó Julia pegando un buen sorbo a su cerveza. -¿A qué te refieres? –Pregunté alterado pues mis sospechas iban a ser ciertas.- ¿Tuviste algo que ver? -Te recomendé. Eso es todo. Sabía que llevabas mucho tiempo sin trabajo. [[Joder, Julia]] [[Gracias, Julia]]

-Es curioso que lo preguntes porque la verdad sí. Me sigo viendo con Mario, ¿te acuerdas? -¡No! No puede ser. ¿En serio? –le pregunté sorprendido pues Mario no terminó la carrera- ¿Y sigues haciendo "Urbex" con él? -¡Sí! Es una locura. Pero aún seguimos haciendo "Urbex" y nos llevamos las cámaras. Tenemos muchas fotos. ¿Quieres verlas? [[Pulsa el botón para ver las fotos]]

-Me siento un poco inútil. Es como si yo no hubiera conseguido nada. -Oye, Sergio. Deberías estar más agradecido. Gracias a mí estás hoy aquí y no en tu casa tocándote los cojones. -Tienes razón. Lo siento –Me disculpé pegando un [[gran trago a la cerveza]]

-Sin tu ayuda no estaría hoy aquí mismo. Debió costarte mucho. -¿Costarme? ¡Nada! Ya sabes cómo soy. Siempre pensando en los demás y muy poco en mí. -Pues deberías pensar más en ti de vez en cuando. Está bien pensar en los demás pero no siempre el resto va a estar ahí cuando los necesites. -Eso es lo que todo el mundo me dice. Estoy cansada de escuchar esa frase. Algún día cambiaré y todos os enterareis- Dijo, algo cabreada No sabía qué más añadir a esa afirmación. Estaba claro que ese tipo de conversación la molestaba. Acerqué el vaso y pegué un [[gran trago a la cerveza]]

Ya la había cagado. Genial, Sergio. No llevaba ni una hora y ya estaba molestando a Julia. Tenía que hacer algo. -Vamos termínate esa cerveza que te invito a la siguiente ronda. -¿Pero qué dices? Sergio que mañana trabajamos. -Ya lo sé. Pero tú me has invitado a la primera, déjame que te invite a la segunda y última. -Vale. Pero la última y nos vamos. Recogí los vasos vacíos y me dirigí a la barra del bar. Tras pelearme cinco minutos por la atención del camarero, volví hacia donde supuestamente estaba Julia. Supuestamente, sí, porque no estaba. [[Esperarla y beberme solo la cerveza]] [[Ir a buscarla al baño]]

Me apoyé en la pared y bebí del vaso mientras contemplaba el resto del panorama. Lo que antes era un 30% de borrachos, ahora pasó a un 60%. Los chupitos del bar, desde luego, habían sido efectivos. A la gente se le daba muy bien socializar, en cambio, aquí estaba yo, el que había perdido a su única amiga en esta ciudad. ¿Se puede ser más patoso? Recorrí con la mirada la pared del bar. Deteniéndome en un cuadro que ilustraba unas ruinas. Me fijé con más detalle y observé que era el puente de la (text-style:"upside-down")[Vía Salaria.] [[¿Pero qué coj…?]]

Dejé las cervezas en la primera mesa que vi y entré al baño llamándola a pleno pulmón. -Idiota. Estoy aquí.-Me susurró una voz detrás del único retrete que había.- Me ha sentado mal el beberme la cerveza tan rápido. Pero estoy bien. No he vomitado. Julia me abrió la puerta de par en par y la vi apoyada en la pared mirando hacia arriba. [[Besarla]] [[Vámonos a casa]]

Me abalancé sobre ella abrazándola alrededor de su cintura. Para mi sorpresa, Julia me correspondió al beso. -Ya era hora, ¿no? Estaba esperando este momento -Me dijo ella entre jadeos. No dije nada. Tan sólo quería seguir besando aquellos carnosos labios. Eran adictivos. Como ella. -Vámonos de aquí. –Me susurró Julia al oído. Caminamos con la cabeza agachada, como si hubiéramos cometido un delito, hacia la salida del bar. -¿Quieres dormir en mi casa? –Le pregunté tímidamente. -Joder, Sergio. Nos acabamos de besar y me lo preguntas con ese tono. ¡Qué tío! ¡Pues claro! Venga vamos a tu piso. Caminé sin hablar y algo avergonzado hasta que llegamos al piso. Francesco, esta vez, no salió a saludarme. [[Adelante]]

-¡Qué tío! Me ves aquí. Esperándote y lo único que me dices es vámonos a casa. Así nunca aprenderás, Sergio. Se abalanzó sobre mí rodeando sus brazos sobre mi cuello. No la entendía. Pero me dejé llevar. La rodeé por su cintura y disfruté de sus carnosos labios. Eran adictivos. Como ella. -Vámonos de aquí. –Me susurró Julia al oído. Caminamos con la cabeza agachada como si hubiéramos cometido un delito hacia la salida del bar. -¿Quieres dormir en mi casa? –Le pregunté tímidamente. -Joder, Sergio. Nos acabamos de besar y me lo preguntas con ese tono. ¡Qué tío! ¡Pues claro! Venga vamos a tu piso. Caminé sin hablar y algo avergonzado hasta que llegamos al piso. Francesco, esta vez, no salió a saludarme. [[Adelante]]

[[Y nos acostamos]]

[[Hasta que fue la hora de trabajar]]

El despertador sonó a las 6 de la mañana. Como todos los días. ¡Menuda noche! ¿Dónde está Julia? Juro que dormimos juntos. ¿Ya se ha ido? No recuerdo que se hubiera ido. Bueno. Vamos a la ducha y a dar comienzo este día. [[Comienza la jornada de trabajo]]

Me encontraba barriendo con un pincel el polvo que se quedaba incrustado en una de las piedras, cuando de repente, encontré algo escrito con lo que parecía rotulador permanente en la cara que estaba limpiando. Decía así: [[Sigue al conejo blanco]]

El despertador sonó a las 6 de la mañana. Como todos los días. ¡Menuda noche! No recordaba nada. Era como si mi memoria hubiera borrado un fragmento de anoche. Bueno. Vamos a la ducha y a dar comienzo este día. [[Comienza la jornada de trabajo]]

Foto 1: Ruinas de un hospital abandonado. Julia aparece mirando las vidrieras de una antigua capilla. [[Siguiente foto]]

Foto 2: Ruinas de una fábrica abandonada. No aparecen ni Mario ni Julia. Hay muchas cajas apiladas, varias mesas y mucho polvo. [[Siguiente foto.]]

Foto 3: Mario dentro de un túnel. Hay un foco que lo alumbra directamente porque el resto de la foto está muy oscura. [[Vamos a ver la foto 4]]

Foto 4: Julia sentada en unas ruinas de lo que parece ser una casa. Hay mucha naturaleza. [[Y la foto 5]]

Foto 5: Ilustración del puente de la (text-style:"blink")[Vía Salaria.] -Julia, ¿y esta litografía? –Pregunté extrañado. -¿Cuál? (text-style:"upside-down")[[La ilustración]]

[[Comienza la jornada de trabajo]]

(text-style:"shudder")[Me encontraba barriendo con un pincel el polvo que se quedaba incrustado en una de las piedras, cuando de repente, encontré algo escrito con lo que parecía rotulador permanente en la cara que estaba limpiando.] Decía así: [[Sigue al conejo blanco]]

Miré a mi izquierda donde se encontraba el árbol más frondoso de la zona, y observé un conejo blanco. Como el de Alicia en el país de las maravillas. ¿Pero qué broma era esta? ¿Seguía durmiendo en mi casa? Sí. Seguro que aún no me había despertado. <img src=https://i.imgur.com/4HcxiKC.jpg> Bueno si estaba en un sueño, ¿por qué no seguirlo? La curiosidad me comía. [[Al igual que a ti]]

¿De verdad había dicho (text-style:"bold")[“ti”]? ¿Estaba hablándole a un espectador? ¿O era mi propia consciencia a la que me refería? Si estaba en un sueño, probablemente me lo estaba diciendo a mí mismo. ¿Pero y si no era yo a quien me había referido? ¿Entonces a quién más? Entré por el túnel. No me podía creer lo que estaba viendo. Era la vía Apia. <img src=https://i.pinimg.com/originals/8f/a1/16/8fa116d676d45495f5289a7c42445552.jpg> La vía Apia como se veía en tiempos romanos. ¿Había viajado al pasado? ¿En realidad era un viajero del tiempo? Ahora que lo pensaba. El puente de la Vía Salaria no era así. La torre no existía desde el siglo XIX. Sólo existía el puente, el cual había sido reconstruido. ¿Entonces en qué había estado trabajando todo este tiempo? Hasta el conejo había desaparecido. La cabeza me iba a estallar. Ya no sabía si estaba dentro de un sueño. ¿La vía Apia era real? ¿En realidad era un viajero del tiempo? ¿El puente era mentira? ¿Pero por qué todos los trabajadores éramos del siglo XX? De un busto que se encontraba situado en una elevación, algo empezó a brillar. Era uno de sus ojos que resaltaba más de lo normal. ¿Debía tocarlo? [[Sí]] [[No]]

De repente, como si hubiera activado un extraño mecanismo, la Vía comenzó a derruirse. Poco a poco, la piedra se iba hundiendo en el suelo. Aún tenía tiempo para escapar pues el agujero no había colapsado. [[Si todo esto es un sueño. Me hundo con el sueño]] [[Huye de allí como si no hubiera un mañana]]

Podía ser alguna trampa. Había visto suficientes películas de acción para saber cómo aquello acababa. Me volví hacia atrás metiéndome en el túnel. [[Volver a la excavación]]

Si lo que estaba viviendo era parte del sueño, quería despertar. Cerré los puños y no los abrí hasta que dejé de escuchar el derrumbe. Una piedra rodó hasta chocar con mi zapato. Al final no había sido para tanto. Casi todo estaba en ruinas pero se había desplomado hacia abajo sin moverse mucho de su lugar. ¡Qué raro! Escuché una tos que venía de delante de mí. Se había formado una pequeña cueva entre dos ruinas y de dentro, un hombre mayor intentaba salir. Corrí hacia el sitio y lo ayudé a salir de allí. Cuando pude verlo por fin, observé que vestía la toga romana. Decisivamente, esto no era el mundo real. -¿Está bien? –Pregunté nervioso. -¿Cómo voy a estar bien? Si me habré tragado un kilo de polvo –Me dijo con tono irónico. -No tengo agua –Respondí palpando mis bolsillos. -Da igual. No me hace falta. ¿Cómo es que no te ha pasado nada? -Pues porque me encontraba fuera del derrumbe. De todos modos, no creo que esto sea real –Le solté sin tapujos. -¿Cómo? ¿Me estás diciendo que no existo? ¿En qué te basas? -En que esto es imposible –Dije sonriendo señalando las ruinas- Mira cómo vistes y mira cómo visto yo. ¿No ve algo que no encaja? -¿Y por qué tengo que ser yo el que no exista? ¿Por qué no puede ser usted? –Me preguntó con toda la razón del mundo. -Pues porque soy yo el que ha llegado aquí. Usted ya estaba. -¿Y por eso tengo que ser yo el que no exista? Vaya afirmación más egoísta de su parte. Seguro que se ha planteado su propia existencia antes. En cambio, [[yo sé quién soy]]

Me metí en el túnel de nuevo. Gateé hasta la salida. Todo había cambiado al volver a la excavación. El puente de la Vía Salaria no era tal y como lo había dejado al meterme en el túnel. En cambio, era un puente mucho más moderno. ¿Pero qué había pasado? Esto no es real. Tenía que despertarme. ¿Pero cuál era el sueño y cuál era la realidad? [[La excavación es la realidad]] [[Esta es la realidad]]

-¿Y quién es usted? –Pregunté intrigado. -Un simple anciano que acaba de sobrevivir a un derrumbe mientras se preocupa por un extraño viajero que anda perdido. -¿Preocuparse por mí? Me está confundiendo. Eso es lo que está haciendo -Le dije enfadado. -No. Usted ya de por sí esta confuso. Se plantea mi existencia, su existencia y si esto es real. Mire en el fondo de su interior y sabrá la respuesta. Medite. Reflexione. ¿Nunca lo ha hecho, verdad? Pues ya va siendo hora. Reflexione por qué está aquí- Respondió el anciano dándose la media vuelta y marchándose de allí. [[Marcharse]] (text-style:"shudder")[[¿Estás empezando a reflexionar?]]

Contemplé el suelo por unos instantes. Era cierto. Me hacía falta reflexionar. Pensar más en mí y en lo que me rodea. Me había pasado toda mi vida siendo un impulsivo tomando decisiones que creía que eran las correctas pero luego resultaba que no. ¿Y si la excavación había sido una mala idea? ¿Y si todo esto era una mala idea? [[Volver a la excavación]]

Di un respingo cayéndome de mi tabla. El libro de arte de Giovanni Battista Piranesi me acompañó en mi caída abriéndose justamente en la ilustración de la Via Apia, la cual había visitado en mi extraño sueño. Me quedé unos segundos en el suelo pensando en lo que había soñado y cómo mi mente pensó que aquello era real. Había creado una realidad para escapar de mi aburrida rutina carcelaria. Eché un vistazo al libro de arte. La portada era una de sus ilustraciones menos conocidas: (text-style:"bold")[Vista del puente de la Via Salaria]. Aquella ruina había sido la protagonista de mi fantasía. Me tumbé en la cama y sostuve el libro en alto observando aquel dibujo. Quería volver a donde empecé. <img src=https://i.imgur.com/isHBl8i.jpg> [[A donde empezó todo]]

Me llamo Sergio D´Angelo. Apasionado de la pintura. La vida no me iba muy bien y necesitaba ingresos extras. Llevaba un año planeando el robo de las ilustraciones de Piranesi, las cuales vendería en el mercado negro. Había estudiado el plan a fondo pero me puse muy nervioso y la última alarma pitó quedándome encerrado en el museo y procediendo a mi detención. Y aquí me hallo teniendo una larga discusión conmigo mismo mientras mi mente recorre las deliciosas pinturas de aquel artista creando una platónica realidad. ¿No me había dado la vida una lección? FIN

Todo había cambiado al volver a la excavación. El puente de la Vía Salaria no era tal y como lo había dejado al meterme en el túnel. En cambio, era un puente mucho más moderno. ¿Pero qué había pasado? Esto no es real. Tenía que despertarme. ¿Pero cuál era el sueño y cuál era la realidad? [[La excavación es la realidad]] [[Esta es la realidad]]

Todo lo que había vivido era real. Había conseguido esa plaza. Me había costado mucho. Esa era la realidad. Tenía que volver otra vez al túnel para despertarme y volver. [[Volver al túnel]]

Esta podía ser la realidad pero, ¿cuándo me había despertado? No había tenido la sensación de irme a dormir desde que empecé la jornada. Esto era raro sí. Quizás esta tampoco fuera la realidad… [[¡Despierta!]]

No me podía creer lo que estaba viendo. Era la vía Apia. La vía Apia como se veía en tiempos romanos. ¿Había viajado al pasado? ¿En realidad era un viajero del tiempo? Ahora que lo pensaba. El puente de la Vía Salaria no era así. La torre no existía desde el siglo XIX. Sólo existía el puente, el cual había sido reconstruido. ¿Entonces en qué había estado trabajando todo este tiempo? Hasta el conejo había desaparecido. La cabeza me iba a estallar. Ya no sabía si estaba en un sueño dentro de un sueño. ¿La vía Apia era real? ¿En realidad era un viajero del tiempo? ¿El puente era mentira? ¿Pero por qué todos los trabajadores éramos del siglo XX? De un busto que se encontraba situado en una elevación, algo empezó a brillar. Era uno de sus ojos que resaltaba más de lo normal. ¿Debía tocarlo? Espera… [[Por qué estoy pensando lo mismo]] (text-style:"blink")[ [[Tienes que salir del bucle]]]

Todo lo que había vivido era real. Había conseguido esa plaza. Me había costado mucho. Esa era la realidad. Tenía que volver otra vez al túnel para despertarme y volver. [[Volver al túnel]]

Ya has llegado hasta aquí. Vamos. [[¡Despierta!]]

Di un respingo cayéndome de mi tabla. El libro de arte de Giovanni Battista Piranesi me acompañó en mi caída abriéndose justamente en la ilustración de la Via Apia, la cual había visitado en mi extraño sueño. Me quedé unos segundos en el suelo pensando en lo que había soñado y cómo mi mente pensó que aquello era real. Había creado una realidad para escapar de mi aburrida rutina carcelaria. Eché un vistazo al libro de arte. La portada era una de sus ilustraciones menos conocidas: (text-style:"bold")[Vista del puente de la Vía Salaria.] Aquella ruina había sido la protagonista de mi fantasía. Me tumbé en la cama y sostuve el libro en alto observando aquel dibujo. Observándolo… Observándolo… Quería volver a mi realidad platónica… <img src=https://i.imgur.com/isHBl8i.jpg> FIN